lunes, 30 de mayo de 2016

Manual de autocontrol para niños

¡Buenos días amigos!

Hoy os paso un manual de autocontrol para niños y adolescentes en conflicto que he encontrado en la Web Psicopedia. No sólo puede servirnos con nuestros niños, sino también con nosotros mismos. 

Es evidente que poder controlar nuestra actitud, nuestras emociones o nuestro nerviosismo es algo que a todos nos interesa. Todos podemos recordar momentos en los que "nos hemos salido del tarro", con nuestra pareja, o hijos, o padres, o con nuestros  compañeros y aunque tendríamos nuestros motivos, las formas provocan que se pierda el sentido de lo ocurrido, se daña a la persona, se daña la relación y por supuesto acuden a nosotros fuertes sentimientos de culpa. Autocontrolarse no es dejar de sentir esas emociones, es legítimo enfadarse o tener rabia o molestarse. Autocontrolarse significa ser consciente de esas emociones y aceptarlas y que no sean ellas las que manden, las que controlen la situación. Se trata por tanto de ser consciente de lo que sentimos y decidir desde la calma qué hacer. Para ello es necesario un ingrediente base fundamental: quererse a uno mismo, para ser paciente, para mirarse con buenos ojos  y por ende para querer y mirar con buenos ojos al otro. No se trata de perdonar, sino de comprender, no se trata de aniquilar los sentimientos, sino de verte en ellos y mimarte sin dejar de ser consciente de que enfrente hay una persona que también siente, que también tiene derecho a enfadarse y que también tiene sus motivos. Sería colocarte en una posición en la que puedes verte y ver al otro y que no sea incompatible, pasar de un yo a un nosotros y desde ahí intentar resolver la situación. ¿Véis lo relacional que es? Ese sería el punto de partida, a partir de ahí podríamos ser más libres para elegir la estrategia correcta frente a la dificultad a la que nos enfrentamos

Por otro lado, supongo que para nosotros también es importante ayudar a nuestros hijos a llegar a esa situación en la que es capaz de afrontar un conflicto sin que le puedan las formas. Tomándonos a nosotros cómo referentes tenemos que ser conscientes de lo difícil que es dominarse, ¿para qué? para ser paciente en el apoyo y entrenamiento de nuestros niños. Aquí no hay magia, los niños aprenden por observación y por entrenamiento. Es necesario invertir tiempo, observar dónde están sus debilidades, ayudarles a tomar conciencia, a comprender la situación desde un punto de vista relacional y a encontrar alternativas para que el acontecimiento sea cual sea el resultado, tenga como consecuencia un "me quiero más y me valoro más" que es de lo que se trata. No es castigarlos por lo que no saben hacer, sino alentarlos a que la próxima vez sea diferente, apoyarlos en encontrar otras formas de afrontar la situación, motivarlos y acompañarlos y anclar esos nuevos aprendizajes con experiencias positivas. Jeje cualquier cosa. Esto resulta muy difícil si no tenemos trabajados nuestro propio autocontrol ¿no os parece?

Este manual os puede ser útil. Es sencillo y utiliza fichas para reflexionar y encontrar tus propios recursos. Os animo a echarle un vistazo.


1 comentario:

  1. Qué interesante Mabel, me viene muy bien ahora que estoy trabajando con mis niños el autocontrol. Gracias por compartirlo.

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